lunes, 9 de julio de 2012

ELS CORTALS DE L’INGLA – PRAT D’AGUILO

NOTA IMPORTANTE: Esto NO es una descripción de la ruta ni una guía útil para aventurarse a recorrer los Cavalls del Vent. Si quieres datos técnicos busca en la página web oficial o en alguno de los muchos foros que hablan de la ruta. Esto es, simplemente, cómo me lo he pasado yo.
28 de junio. Nos despedimos de Sergi, que terminaba la ruta ese mismo día porque estaba fuerte y se iba a meter dos etapas de las nuestras en una sola.
Hoy, para nosotros, no había refu intermedio y la etapa era corta, así que nos la tomamos con caaaalma y sacamos muchas fotos. Compartimos el paseo con Jordi y Alba.
COSAS RARAS SOBRE LAS QUE SE HABLA EN LA MONTAÑA:
Vídeos de YouTube. Comics. Series de televisión. Nutrición (eso no es tan raro, vale). Adivinanzas. Libros. Recetas de cocina. El trabajo (¡caca, caca!). El gobierno. Y luego ya, por fin, sobre lo bonita que es la ruta.
Esta es, posiblemente, la etapa más bonita de toda la ruta, y eso que la ruta es muy bonita de principio a fin.
Estaba todo tan verde, que daba gusto caminar.
Vimos muchos caballos, pero ningún pegaso, que según Eduardo son los auténticos “caballos de viento”. Esa fue la chorrada del día, bueno, una de ellas, tan solo.



Llegamos al refu pronto y nos comimos un buen bocata y un plato de lechuga que nos puso el guarda, Jesús, que es un tipo muy majete. El “jamón ahumado” vegano que llevábamos era un poco fuerte para nuestros estómagos, pero se deja comer muy bien.
Pasamos unas horas de relax, haciendo amigos. Coincidimos ocho personas del primer refu, así que nos pasamos la tarde de palique. Volvimos a ver a Juan Carlos y Paula, con quien no habíamos coincidido la noche anterior y que llegaron frescos como lechugas a pesar de venir desde El Serrat. Sacamos unas cuantas fotos del anochecer realmente espectaculares, porque el entorno es realmente espect… esto… Está muy bien y es muy bonito.
Para la cena, macarrones al pesto muy ricos, que estuvimos pensando si cenar o no porque el guarda se había despistado y los había preparado con queso. Pero como somos gente muy civilizada y comprensiva no lo tiramos barranco abajo. Nos los comimos porque no era plan de que preparara otro plato, aunque luego nos dijo que lo habría hecho si se lo hubiéramos pedido.
y de segundo garbanzos salteados, buenísimos.


Momento ¿Nos hacemos viejos? :

Ya estábamos terminando de cenar cuando ocurrió algo… sorprendente. Vimos llegar dando tumbos a un tipo que bajaba por el camino que venía de Els Cortals. Parecía que se iba a desmayar de un momento a otro. Pensamos en salir a buscarlo cuando nos enteramos de que su compañero estaba cenando en el refu. Parece ser que el tipo se había desmayado y estaba con una pájara de impresión y que le había dicho a su compi que “fuera tirando”. Y su compañero le hizo caso.
No vamos a decir si eso está bien o está mal hecho. Nosotros pensamos que NUNCA se deja a nadie solo en la montaña si se encuentra mal. Nunca. No lo hacemos con un desconocido, mucho menos con un compañero. Quizá esta “nueva forma” de entender la montaña tenga algo que ver con el afán por “hacer el mejor tiempo posible” que está tan de moda. No lo sabemos. Pero sí sabemos que nosotros no hacemos así las cosas.

Anochece en Prat d'Aguilo


2 comentarios:

  1. Hace falta ser un capullo para hacer eso. Al que estaba cenando era para estamparle el plato en la cara, vamos.

    Ea.

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  2. Me ha encantado leer el viaje de pe a pa. Alucino positivamente (o sea, en colores bonitos) de lo que cuentas de la comida en los refugios. Puntazo para toda esa gente.

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